jueves, 26 de febrero de 2009

Alianza Stroessner-Fernando Lugo impide recuperar bienes malhabidos

LUIS AGÜERO WAGNER- La férrea alianza que mantiene el obispo Fernando Lugo con el sector del extinto dictador Alfredo Stroessner, aglutinado por su nieto Gustavo Alfredo Stroessner, impide convertir en universidad popular una mansión de la familia del dictador.

El defensor de los derechos humanos, Martín Almada, remitió hace unas semanas un escrito a la Municipalidad de Asunción a través del cual pide informes sobre la mansión a nombre de Alfredo Stroessner Mora, hijo del ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner Matiauda, que está ubicada sobre Santísima Trinidad, en el barrio del mismo nombre.

El terreno en el cual se encuentra la propiedad había sido donado en forma ilegal por la intendencia de Asunción al hijo del dictador décadas atrás.

A pesar de haberse publicitado al obispo Fernando Lugo como "el cambio" en el Paraguay, hoy se encuentra aliado en el parlamento con Stroessner, hecho que le impide avanzar en la recuperación de bienes malhabidos de los cuales se apoderaron los jerarcas del régimen.

Almada solicita desde hace un tiempo que ese edificio se convierta en una universidad, pero las autoridades siguen haciendo oídos sordos, debido a la gran influencia de los Stroessner por su poderío económico y sus alianzas con el obispo en el Congreso.

El defensor de los derechos humanos recordó que pidió al Congreso, el 12 de noviembre del año 2008, que impulse una ley para expropiar esta mansión. Indicó que espera que ese lugar, considerado como un bien malhabido de la dictadura, se utilice para crear la Universidad Popular de Derechos Humanos y Ecología “Carmen de Lara Castro”.

Sin embargo, hasta ahora la solicitud del laureado luchador por los Derechos Humanos no ha tenido eco.

El obispo Fernando Lugo ganó las elecciones del 20 de abril del año pasado con fuerte respaldo de la embajada norteamericana, la prensa anticomunista vinculada a la secta Moon y los sectores colorados disidentes de derechas: el de Stroessner y Luis Castiglioni. LAW

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